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¿Por qué suben los robos en Almería?

Publicado en Seguridad en Almería
07 Noviembre 2012

La dificultad para conseguir buenos botines, el precio del oro y la presión de la Guardia Civil y Policía contra el hurto cambian las tendencias · La actividad delictiva global ha vuelto a descender este año

La crisis ha dado la cara en lo que se refiere al incremento de robos. La Fiscalía General del Estado así lo indica en su memoria anual, donde destaca una considerable evolución de la delincuencia organizada en la provincia de Almería que, aunque se mantiene en los mismos tipos delictivos de años anteriores, sí ha experimentado algunas variaciones. Entre otras diferencias destaca la forma de cometerse los robos en la provincia, como es caso de los robos con violencia. Y es que ahora los delincuentes buscan fórmulas que les permitan hacerse de una forma relativamente fácil y rápida con un botín cuyos beneficios sean más altos. Este es el caso de los robos de joyas por el método del tirón en plena vía pública o los tirones de bolsos.
Hasta hace unos años, posiblemente muchos de los infractores que han sido detenidos por este tipo de delincuencia en Almería antes se dedicaban a otra actividad delincuencial. Esto demuestra que, debido a la crisis, los ladrones también han tenido que adaptar sus técnicas y objetivos a la situación.

La presión de la Guardia Civil y de la Policía es uno de los elementos que permitirían explicar parte del fenómeno. El acecho de delincuentes, con dispositivos específicos en diversos distritos, han obligado al delincuente o bien a marcharse a otras zonas o a cambiar de fechoría para, en un solo golpe, conseguir el botín necesario.

La subida del precio del oro ha hecho que cada vez sean más habituales los tirones de joyas en plena vía pública que otro tipo de robo que antes copaba las cifras más altas de delincuencia. Este tipo de infracciones se ha convertido en una alternativa rápida y de altos y suculentos beneficios para el delincuente. En la búsqueda de botines mayores influye mucho el hecho de que el precio del citado metal precioso no deja de subir. Su robo es un negocio ilícito muy lucrativo. Y la sustracción de una cadena de oro del cuello de la víctima es un robo violento, al igual que el tirón de bolso.

La Fiscalía también advierte la "creciente actividad" de bandas organizadas para cometer robos violentos, especialmente en entidades bancarias, así como en viviendas habitadas.

Sin embargo, son los robos contra el patrimonio los que ocupan el capitulo más extenso en la memoria anual de la Fiscalía. Las incoaciones alcanzan la cifra de 29.862 diligencias judiciales. Esto implica un importante porcentaje del total de diligencias previas incoadas, en concreto un 48,69%, dato que evidencia, según la Fiscalía, "un incremento de la importancia relativa de estos delitos". Matiza, no obstante, una disminución de hurtos. Según las cifras que arroja la memoria, el incremento de robos con fuerza en casas habitadas es de un 75,7%.

Posiblemente sean razones de carácter socioeconómico o demográficas las que expliquen esta situación. Esta subida se produce en un contexto en el que la mayoría de los indicadores delictivos desciende por quinto año consecutivo, esto es, las infracciones penales conocidas bajan globalmente, tal y como también destacó el comisario jefe de Almería durante su discurso en los actos oficiales de la festividad de los Santos Ángeles Custodios.

A pesar de estos datos, la Fiscalía deja muy claro en sus conclusiones que han dejado prácticamente de cometerse casos tan complejos como los hasta hace poco "habituales secuestros".

También refleja una significativa disminución de las cantidades de droga que entran a nuestra provincia, lo que se interpreta como un aval de la eficacia de los mecanismos policiales.

En lo que se refiere a homicidios, apenas se ha registrado un importante descenso, puesto que sólo hay uno menos respecto al año anterior. Y las cifras de incoaciones por asesinato se mantienen idénticas.

Por otro lado, los delitos contra la libertad acusaron un ligero descenso, y los delitos contra la libertad sexual también bajaron un 26,1%, según se desprende de las conclusiones de la Fiscalía.

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